Germán Rubio, productor ejecutivo en PANARAMA Studio Audiovisual
¿Quién es Germán Rubio?
Es un profesional con más de dos décadas de experiencia en la industria audiovisual, donde ha ejercido un enfoque híbrido entre la sensibilidad artística y la eficiencia operativa. Su carrera comenzó en la edición de documentales y formatos televisivos, donde desarrolló una comprensión profunda del ritmo narrativo y la emoción visual. Posteriormente, se consolidó en el ámbito del prime time con realities, afinando su capacidad para conectar con audiencias masivas y entender los códigos de la comunicación emocional.
Tras una etapa de emprendimiento compartido y años de carrera freelance, funda PANARAMA Studio, donde actualmente lidera como productor ejecutivo. Su rol es integral: acompaña a las marcas desde la conceptualización creativa hasta la ejecución técnica del proyecto. Su valor diferencial es convertir insights estratégicos y necesidades de comunicación en narrativas visuales potentes, auténticas y alineadas con los valores del cliente. Cree que detrás de cada brief hay una historia que merece ser contada de forma honesta y con identidad propia.
¿Qué es Panarama Studio?
Es un espacio creativo donde la narrativa audiovisual se convierte en herramienta estratégica de comunicación. Con una trayectoria de casi diez años, el estudio ha desarrollado un enfoque distintivo centrado en el storytelling de marca, abordando cada proyecto desde una perspectiva que equilibra lo artístico con lo comercial.
Especializado en contenido publicitario, PANARAMA colabora con marcas y empresas para construir piezas audiovisuales que no solo informan, sino que emocionan y posicionan. Utilizamos el lenguaje narrativo para anclar el mensaje de marca a un contexto emocional, creando memorabilidad y diferenciación. Nuestro método se basa en el análisis del ADN de cada cliente, el diseño de estructuras narrativas adaptadas a su target, y la ejecución con estándares técnicos de alta calidad.
El estudio ha sido galardonado en certámenes como el Smile Festival, Publifestival y Summit Creative Awards, reflejo del reconocimiento a su capacidad para mezclar creatividad con estrategia, y el uso del humor como vector de conexión emocional.
¿Cuál ha sido vuestra mejor pieza?
Seleccionar una sola es como elegir una sola emoción en una película: todas cumplen una función esencial. Sin embargo, uno de nuestros proyectos más representativos en términos de creatividad aplicada a la conversión es la campaña SPIUK: NOW ON LINE donde transformamos una experiencia de usuario cotidiana —la compra digital— en una narrativa audiovisual dinámica y fresca.
Esta campaña se convirtió en un ejemplo de cómo la creatividad y la funcionalidad pueden convivir. Trabajamos desde una mecánica de guion que simplificaba procesos complejos. A nivel de producción, implementamos recursos visuales dinámicos y una dirección de arte vibrante que conectara con el target digital del cliente. El tono ligero, el ritmo preciso y la libertad creativa que nos dio el cliente fueron claves para alcanzar un resultado que no solo superó expectativas, sino que obtuvo una excelente recepción entre su audiencia.
¿Una campaña de referencia?
Entre nuestras principales fuentes de inspiración se encuentran las que elevan la narrativa emocional por encima de los artificios tecnológicos. Una que ilustra perfectamente esta filosofía es “Mum’s Birthday” de Cadbury. Una narrativa minimalista, sin efectos especiales, donde el poder reside en la construcción emocional y la dirección actoral precisa.
Este tipo de piezas nos recuerda que el corazón de una buena campaña no siempre está en la espectacularidad, sino en la empatía narrativa. En la misma línea, destacamos campañas como «Hope» o los spots del Atlético de Madrid, todos estos proyectos firmados por Sra. Rushmore, que manejan con maestría los códigos del drama cotidiano con una estética visual contenida pero poderosa.
Estas referencias nos inspiran porque demuestran que la conexión con el espectador no se logra con grandes efectos, sino con grandes verdades humanas. Y esa es también nuestra apuesta en PANARAMA: contar historias que hagan vibrar al público sin necesidad de levantar la voz.
