Katia González, directora creativa en iTres Bilbao

¿Quién es Katia González?

Soy directora creativa en iTres Bilbao desde 2015. Estudié Periodismo y Publicidad, y aunque adoro la comunicación en todas sus formas, fue la publicidad la que me  robó el corazón.

Lo mío es crear marcas con alma, mensajes con sentido (doble sentido, sentido del humor…), y estrategias que además de sonar bien, funcionen. Me apasiona escribir, jugar con las palabras y construir universos donde las marcas conectan.

Desde que leí “Di la verdad pero hazla apasionante” lo convertí en mi brújula profesional (y también un poco vital).

¿Qué es iTres Bilbao, Agencia del Siglo XXI?

iTres es una agencia de comunicación estratégica que pone su foco en conseguir los  objetivos de sus clientes.

Escuchamos, analizamos, preguntamos y lo damos todo por  ayudarles a cumplir sus objetivos.

Porque muchas veces nos vienen con un “quiero un vídeo”, “necesito un logo”, “sácame en redes”… y claro, eso está genial. Pero lo que realmente necesitas primero es parar, repensar tu marca, actualizarla, entender qué quieres contar y a quién. Y para eso estamos: para acompañarte desde la inicio  hasta el despegue.

Nuestras oficinas son el atípico sitio  donde nacen ideas, huele a café del  bueno y fluye el buen rollo,  mira:

¿Cuál ha sido vuestra mejor campaña?

Elegir solo una es como escoger a tu hijo favorito. Imposible. Pero si tengo que mojarme, me quedo con Taller Clandestino, la marca de cócteles que creamos como evolución natural de la escuela de coctelería de Jimmy Valios. Un proyecto que nació con personalidad, propósito y sabor propio.

Desde el naming hasta la estrategia, pasando por  la identidad visual, el diseño de producto, el tono de marca, la web, las redes sociales e incluso detalles del espacio físico, construimos un universo completo que hoy  se ha convertido en la coctelería de referencia en  Zaragoza.

Su identidad canalla logró conectar directamente con su público objetivo: personas que valoran la experiencia tanto como el sabor. Queríamos que cada interacción con la marca —desde el primer sorbo hasta el último story— generara recuerdo, ganas de compartir y, sobre todo, de volver.

Uno  de nuestros grandes aciertos fue  entender que el espacio físico era también un canal de comunicación. Por  eso, colaboramos en  el diseño interior del local para convertirlo en un lugar “instagramable”, coherente con la marca, y lleno  de pequeños guiños como el famoso neón: “Lo que pasa en el Taller, se queda en el Taller.” Que  spoiler: no se queda ahí, se sube a redes.

Taller Clandestino no es solo una coctelería. Es una experiencia con narrativa propia. Una marca que demuestra que cuando estrategia y creatividad trabajan en  equipo, el resultado deja huella.

¿Una campaña que no es nuestra pero que ojalá?

Me encantan las campañas que sorprenden y conectan con el público sin necesidad de hacer una inversión enorme.  Conseguir con una simple frase hacer clic en la cabeza de tu público y generar un cambio que se traduce en objetivos cumplidos. Es decir: tener una buena idea, una ejecución honesta y una conexión emocional real.

Por  eso destaco esta acción de la Fundación Reina Sofía que logra explicar una realidad compleja con un gesto muy  simple.

Genera empatía en pocos segundos poniendo al espectador en el centro y consigue lo más difícil en comunicación: que te lo lleves contigo después de verlo.

Las  grandes ideas no siempre necesitan un presupuesto millonario. A veces, solo necesitan una verdad y una forma inteligente (y humana) de contarla.

Esta acción sobre el Alzheimer, logra explicar una realidad compleja con un gesto muy  simple: ponerte en la situación de la persona que lo padece. Y ya está. Tan simple como brillante. Porque de repente, tú —espectador o viandante— entiendes, sientes y empatizas. Y eso, en comunicación, es oro puro.